La implicación internacional en el Líbano: no sólo cuenta lo militar
Narcís Serra, presidente de CIDOB, advirtió de las dificultades para conseguir una paz duradera en el Líbano si la comunidad internacional olvida los principios de la seguridad humana. Serra realizó estas declaraciones en la presentación de una mesa redonda
Narcís Serra, presidente de la Fundación CIDOB, advirtió de las dificultades para conseguir una paz duradera en el Líbano si la comunidad internacional olvida los principios de la seguridad humana. Serra realizó estas declaraciones en la presentación de una mesa redonda, organizada por el programa Mediterráneo de la Fundación CIDOB y el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMED), en la que se analizó el papel de la comunidad internacional en el Líbano tras el conflicto originado en la región este verano.
A parte de la intervención del presidente de la Fundación CIDOB, el acto contó la participación de Senén Florensa, director general de IEMed; Mosbah- al-Ahdab, diputado sunita en el Líbano; Tomás Alcoverro, corresponsal de La Vanguardia en Beirut (Líbano); Fred Halliday, profesor de la London School of Economics y del Instituto Barcelona de Estudios Internacionales (IBEI); Álvaro Iranzo, director general de Política Exterior para el Mediterráneo, Oriente Próximo y África del ministerio de Asuntos Exteriores; Rosa Meneses, periodista del diario El Mundo; Samir Moubarak, embajador del Líbano en España; y Nadim Shehadi, investigador en el Chatam House de Londres. (Consultar programa)
Sobre la valoración de la implicación internacional en el Líbano, Rosa Meneses mostró su preocupación acerca de que la militarización relegue a un segundo plano la agenda de reconstrucción. La periodista de El Mundo, que cubrió como corresponsal el conflicto del Líbano, destacó también las tensiones que vive la política libanesa, las dificultades de creación de un gobierno de unidad nacional y la infra-representación chií en las estructuras de poder.En la misma línea, Tomás Alcoverro advirtió del riesgo que la FINUL (Fuerza Interina de Naciones Unidas en el Líbano) sea percibida como una fuerza de ocupación. El corresponsal de La Vanguardia aportó una visión pesimista sobre el desarrollo actual de los acontecimientos. “Se ha instaurado la cultura de los cónsules, una influencia de los representantes internacionales en el Líbano mayor a la habitual en otros países”.En contraposición con la opinión de Alcoverro, Mosbad al-Ahdab subrayó que la FINUL no es vista como una fuerza de ocupación, sino al contrario. Según el diputado sunita del Líbano, que criticó duramente la ingerencia siria e iraní en el conflicto “un importantísimo segmento de la población libanesa apoya la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”.Pero no sólo se habló del papel europeo en el conflicto libanés, sino también de la influencia de otros países. Nadim Shehadi destacó importancia de la cada vez más tensa relación entre Irán y Estados Unidos.
El investigador del Chatham House de Londres recalcó que “la presencia europea en la FINUL proporciona un nuevo significado a las relaciones transatlánticas, ya que la política norteamericana en la región puede afectar a los soldados europeos desplegados en el Líbano”.Además, Fred Halliday manifestó que la posición de otros dos importantes actores en el conflicto como Irán y Hizbollah no se limita a lo militar. El profesor de la London School of Economics y del Instituto Barcelona de Estudios Internacionales (IBEI) describió el conflicto como “la primera guerra Israelo-Iraní”, presagiando que no seria la última. Halliday también afirmó que “no estamos ante un conflicto de frontera, sino de reconocimiento de soberanía”.